El mentor y su filosofía de vida.

En la actualidad se habla del nuevo capitalismo: El capitalismo del conocimiento, pero en este tipo de capitalismo lo que menos interesará es el conocimiento, ya no bastará con que alguien nos brinde datos históricos, estadísticos, sociales, ambientales, para destacar, solucionar problemas o motivarnos, dado que eso estará al alcance de todo aquel que maneje una computadora o un Smartphone. Todo el conocimiento estará en la red.

El capitalismo del conocimiento hará énfasis en que se hace con ese conocimiento o en que se aplica, eso es lo que tendrá valor. Las organizaciones ya no buscaran candidatos con grandes estudios académicos, sino que buscan en su curriculum, como han aplicado ese conocimiento en su vida diaria: En lo personal, laboral, familiar y social.

Hoy las empresas están dando un vuelco  a su mirada para escoger a su personal, ya no hacen énfasis en sus habilidades técnicas, al menos no en forma prioritaria como antes, sino en sus habilidades blandas, las softskills, porque la experiencia les dice, que si es importante que un jefe de sistema sepa de sistema, pero es más importante que éste tenga la habilidad para motivar a su equipo para que haga bien su trabajo, pero con competencias cardinales sinceras y desarrolladas realmente, no que muestre que las tiene, pero sólo para no perder su trabajo.

El futuro es el desarrollo real de virtudes en el ser humano, ahora se habla de gestión por competencias, pero eso muchas veces descansa en un manual que rara vez se abre. El mentoring puede ser parte de esta solución, siendo la vanguardia que vaya más allá de los consejos: Que exista una verdadera transmisión de la experiencia sobre una competencia o virtud realmente desarrollada.

Los estudiosos del desarrollo humano nos dicen que para desarrollar una competencia en un porcentaje apreciable y que se pueda evidenciar se necesitan de cinco años de arduo trabajo.

El mentor y su filosofía de vida: Estamos llamados, como mentores, a mostrar cómo se vive una vida digna: Alejados de los vicios, involucrados en labores altruista o filantrópicas, haciendo prácticas meditativas o reflexivas, siendo un referente como buen profesional.

Los mentorados quieren caminar de la tierra al cielo, siendo ese cielo ese estado de paz, felicidad, realización personal y sabiduría, eso es tarea del mentor, pero hay que recorrer un camino seguro y bien trazado, esa es la filosofía de vida de dicho mentor.