Un Socio Complementario, un socio Ideal…

Soy de la idea que si una persona, es consciente, que solo tiene uno de ellos desarrollado, necesariamente deberá buscarse un socio complementario.

Es una condición necesaria pero no suficiente, ya que también deben coincidir en el camino que deben transitar. Ambos tienen que tener las mismas ambiciones; quizás no los mismos objetivos personales pero sí el camino para lograrlo, deben seguir el mismo sentido y dirección.

El respeto mutuo de sus especializaciones, la delegación de tareas, la fijación de las obligaciones y responsabilidades, la claridad de las acciones, la vocación y el dialogo permanente son las claves que garantizan el éxito de una sociedad.

Las sociedades en promedio suelen durar diez años y por diferentes razones los socios se separan, venden sus partes, fraccionan los negocios…pero así y todo diez años es mucho tiempo.

Si hacemos una cuanta rápida y consideramos que interactuamos con nuestro socio doce horas diarias, y lo comparamos con el tiempo que estamos con nuestra esposa (despiertos) esto nos da una relación de 3 a 1; y muchos pero muchos matrimonios duran menos de treinta años.

Intento decir que elegir un socio para los negocios es un tema sumamente difícil y muchos tienen la fortuna de encontrarlo.