Duelo de Titanes

Management y deporte. ¿Inteligencias diferentes o complementarias? Visiones apasionantes de realidades similares. Dos fueras de serie en su campo, en el rincón de la derecha con traje gris y una mente privilegiada Javier Fernández Aguado, el mayor exponente del management español, Premio al Mejor Pensador, Premio al Mejor Speaker, autor de más de 35 libros, único pensador español al que se le ha dedica un simposium sobre su pensamiento en vida… Y en el rincón de mi izquierda, con chaqueta azul y la determinación de un samurái, José Luis Abajo “Pirri” único medallista olímpico español de esgrima, medallista mundial y europeo, campeón de España en todas las categorías e incluso de Francia por equipos, y mayor exponente del deporte de la espada española.

La suerte que siempre me acompaña me colocó en el lugar preciso, la salida de la magnífica edición 2015 del Manager Forum de Valencia, en el momento adecuado, sentados tomando una cerveza con una hora larga por delante hasta que saliera nuestro AVE de vuelta a Madrid. ¿Cómo desaprovechar estar en compañía de estos dos monstruos sin hacer nada? Dos admirados profesionales, dos grandísimas personas y dos muy queridos amigos…¿Cómo no tratar de exprimir sus experiencias y conocimientos, aunque sea en una estación esperando a que salga nuestro tren?

Así que ni corto ni perezoso, saqué mi portátil y me dispuse a provocar un interesante debate, un apasionante intercambio de ideas y puntos de vista, del que disfruté y aprendí mucho, y del que os dejo algunas de reflexiones que más me gustaron.

¿Cuánto tiempo dedicáis a entrenar para poder llegar a donde has llegado?

Pirri: Mañana y tarde todos los días. Mañana y tarde, durante más de 15 años. El entrenamiento de esgrima tiene que ser muy completo si quieres tener una oportunidad de competir al más alto nivel. Cardio, velocidad, potencia, técnica… Si quieres poder competir tienes que prepararte y desarrollar cada uno de los detalles. Son los pequeños detalles los que marcan la diferencia entre una medalla o una derrota.

Javier: Yo leo compulsivamente desde que tengo 10 años. Devoro unos 3 libros a la semana de media. Me levanto temprano y leo antes de llevar a mis niños al cole, hago una pausa para regalarme uno de los mejores momentos del día, y luego vuelvo a mi despacho para seguir leyendo otro par de horas al menos.

¿Para qué tanta entrega, tanto sacrificio? ¿Qué os reporta?

Pirri: La repetición te lleva al dominio, y la pericia personal es la que te permite convertir el dominio en excelencia. Ese entrenamiento es el que marca la diferencia, es el segundo que te hace ganar una medalla. ¡Además¡¡Llevo 25 años haciendo esgrima y no sólo no me aburro, sino que me apasiona cada día más!

Javier: Por responsabilidad. Por ser útil, por poder ayudar. Porque disfruto mucho. Me apasiona leer, estudiar, aprender y poder compartir mis reflexiones para poder aportar mi granito de arena a la transformación del mundo empresarial. ¿Cómo voy a sentarme delante de un directivo para tratar de ayudarle sin haberme preparado lo mejor que pueda? No lo concibo.

¿Qué es el éxito para ti?

Pirri: Para mí el éxito es ser feliz. Es buscar un objetivo disfrutando del camino, trabajando duro cada día para conseguirlo. Uno de mis mayores éxitos es mi mujer, quien es una de las principales causas de mi medalla de Pekín. La gente que te quiere es la que te hace grande. Ni tu talento no es igual a éxito, ni tu cargo tampoco. Confundir lo que haces con lo que eres es un gran error. Un gran éxito para mí es poder dejar un legado a los jóvenes deportistas que vienen detrás, habiéndoles demostrado que si se quiere algo de verdad, se puede.

Javier: Tener alguien que te espere, y alguien a quien esperar. Conozco a mucho millonario por mi trabajo, a mucha gente que ha tenido el llamado “éxito” que viven en una profunda soledad que les amarga todo lo demás. Cada uno de nosotros somos sólo, en la medida en la que tenemos alguien a nuestro lado. El triunfo no lo quiero a cualquier precio. Renunciar a todo por un mal llamado éxito es la peor decisión que uno puede tomar. Como decían los egipcios, lo que nos da la felicidad es el corazón, no el bolsillo. Le importamos de verdad a poca gente, y a esa es a la que tenemos que cuidar por encima de todo lo demás.

¿La suerte marca nuestro destino o somos dueños de nuestro futuro?

Pirri: La suerte no existe y menos en el mundo del deporte. Todo pasa por algo. Si el balón da en el poste es porque el lanzador no lo ha hecho bien. Si no llego a tocar a mi rival es porque no he me he preparado suficiente. La causalidad es mi referente, la casualidad es la excusa de los mediocres. Se habla con demasiada ligereza de la suerte en el deporte. ¿Me estás decidiendo que tras 21 años preparándome, entrenando todos los días mañana y tarde el que gane mi medalla con un tocado de oro ha sido suerte?

Javier: La suerte es un ingrediente del éxito, pero la mayor parte de ella se consigue trabajando. El azar, la providencia, el destino tienen un papel en el resultado de mi esfuerzo, pero yo creo que soy dueño de lo que me sucede.

¿Cómo miras al futuro? ¿Qué significa para ti ser un líder? ¿Cómo levantarte de una gran derrota? ¿Dónde encuentras tu inspiración?… Estás y otras muchas preguntas revoloteaban por mi cabeza cuando la megafonía anunció la salida de nuestro tren. ¿Ya había pasado hora y media?

Cuánto disfruta y cuanto aprende uno cuando está con gente extraordinaria. Javier y Pirri, dos ganadores, dos luchadores, un estilo, que sin duda es un gran referente para mí.

¡A ver si la próxima vez vamos en avión, que seguro que tendremos mucho más tiempo de espera para disfrutar!