Dígale NO, al NO.
Si usted desea tener éxito, dígale NO al NO, el NO es parte fundamental del éxito.
Cuando mi hija Alison Daniela tenía cuatro años de edad, me di cuenta de que ella lograba todo lo que deseaba, se proponía algo y no descansaba hasta alcanzarlo, en una oportunidad en un Centro Comercial en la Ciudad de Atenas, Alajuela a la que ella le llamaba la Galleta, después de haber cenado toda la familia, ella se propuso como meta que le comprara un batido de helado con caramelo, tanto su madre como yo nos opusimos porque recién había comido y había dejado más de la mitad de su cena.
Ella con un tono de voz convincente insistía en que deseaba el batido, nosotros de nuestro lado repetíamos como en coro el NO, ella, nos hacía preguntas cerradas cómo porque?, nosotros respondíamos que porque no se lo iba a comer, continuaba preguntando; Porque? hasta que llegó un momento en que nos desarmo y terminamos comprándole el batido, mismo que disfruto por largos minutos, demostrando con su mirada y con su postura de que a sus cuatro años era una mujer invencible.
El No, el parte fundamental del Éxito, cuando un cliente o un prospecto nos dice No, nos está diciendo cuénteme más, deseo conocer más sobre usted y sobre su producto.
Esta usted en una entrevista con un nuevo cliente, ha mostrado usted su producto y los beneficios de este, y este nuevo cliente, le dice a usted, si me interesa, pero llámeme a inicios del próximos año, a lo que usted, saca su agenda y anota, “Contactar el Señor Pérez en Enero del próximo año” guarda su agenda, guarda su catálogo, se despide amigablemente, pero con postura derrotista y se marcha, luego se dice a sí mismo, que mal, no he conseguido ventas esta semana y estoy mal en este mes.
Qué tal si usted en vez de anotar en su agenda la fecha para contactarlo el próximo año, se hubiera detenido un momento y le hace algunas preguntas, tales como;
1. De acuerdo a lo conversado y el interés que usted muestra en nuestro producto Señor Pérez, en una escala de 0 a 10, siendo cero la nota más baja y diez la nota más alta, en donde situaría usted su interés en nuestro producto?
Respuesta; La respuesta casi siempre esta, entre cinco y siete.
2. Lo que nos llevaría a una segunda pregunta; Que faltaría para llegar a diez, Señor Pérez?
Respuesta; Pensarlo y hablarlo con mi esposa.
3. Que diría su esposa Señor Pérez, si sabe que usted ha adquirido una póliza de salud para toda la familia y que tanto usted, ella y sus hijos estarán 100% protegidos, por cualquier accidente o enfermedad que pudieran sufrir?
Respuesta; Ella siempre ha sido la más interesada en que estemos protegidos.
4. Que diría ella, Como se sentiría?
Respuesta: Ella se sentiría feliz, ella diría que la familia es lo más importante.
5. Como se sentiría usted señor Pérez, si algún miembro de su familia sufre algún accidente o alguna enfermedad en este momento, estando descubierto?
Respuesta; Pues es una situación que no desearía vivir.
6. Que cambiaría de hoy a principios del próximo año, Recibiría algún pago adicional, liquidaría alguna inversión, vendería algún bien inmueble, mejoraría su ingreso mensual.
Respuesta; en realidad la situación será exactamente la misma.
Conclusión:
• Si la situación económica es exactamente la misma a principios de año, que la situación del día de hoy, No hay razón para que este al descubierto tanto usted como su familia por casi siete meses.
• Si la prima mensual está acorde a su presupuesto, no hay razón para posponer la protección familiar y así tomar una decisión inteligente.
• Tanto su esposa como usted son conscientes de la importancia de contar con la protección familiar. Cierto? A lo que El asentirá que Sí.
En ese momento dejamos de hablar y nos quedamos callados, el primero que habla pierde, y empezamos a llenar los documentos necesarios, empezando por solicitarle su cedula de identidad o documento de identificación.
Que cree usted que hubiera pasado si Tomas Alva Edison, hubiera dejado todo tirado cuando llevaba cien intentos para inventar la lámpara incandescente, Tomas Alva Edison le dijo No, al No.
O que hubiera sucedido si el Coronel Sanders, después de haber visitado veinte restaurantes en los Estados Unidos y donde todos le habían dicho que No a la compra de su receta de pollo frito al estilo Sureño se hubiera echado atrás y hubiera dicho, soy un desastre soy un fracasado, el Coronel Sanders a sus sesenta y dos años le dijo No al No.
Tenga presente usted, que cada vez de que un cliente le dice a usted que No, le está
diciendo, quiero saber más de usted.
No acepte un No, como respuesta, dígase hoy, No al No.