Los retos de la mamá emprendedora

Sin importar cuántos años tengan los hijos, ser mamá demanda tiempo completo, si además tiene que gestionar un negocio, puede ser la fórmula perfecta para vivir abrumada. Ésa es la situación de gran parte de las mompreneurs (madres emprendedoras).

"Creemos que la mujer se ha liberado, pero resulta que son demasiadas cachuchas las que se pone: madre, empleadora, esposa, amiga, familia, eso es demasiada presión", afirma Sandra Herrera López, directora del Premio UVM (Universidad del Valle de México) por el desarrollo social.

De acuerdo con estimaciones del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), 25 de cada 100 viviendas en el país están a cargo de una mujer. Herrera López detalla que de 18 millones de hogares nucleares (formados por papá, mamá e hijos, o sólo papá / mamá e hijos), en 6 millones la cabeza de familia es la madre.

Aunque ambos sexos deberían tener las mismas responsabilidades, cuando se alterna el desarrollo de un negocio con el cuidado de la familia, ellas terminan invirtiendo más; de acuerdo con López, el crecimiento de la mujer en el terreno laboral y la economía familiar no ha sido acompañado por la inmersión del hombre en las tareas del hogar.

"Se piensa que el emprender es un anexo o pasatiempo para que ellas no se queden en casa aburridas". Al contrario, "las mamás con una empresa quiere un proyecto exitoso y no reniegan de su condición de maternidad, están felices de serlo, el problema es que muchas veces están solas en el emprendimiento", explica Sandra Herrera López, economista y doctora en Ciencias Sociales y Políticas.

El informe Mompreneurs: Real Life Wonder Women, de la firma Denken Research and Consulting y Ladies Who Launch, organización estadounidense que brinda consultoría a emprendedoras, arrojó que el principal desafío de las madres con un negocio es la gestión del tiempo, no el dinero. Experimentan una "sensación abrumadora" de querer hacer todo bien y no se dan abasto.

Otros obstáculo que enfrentan las emprendedoras son el encontrar un socio confiable, así como una persona que pueda apoyarlas en el cuidado de los hijos en una situación de emergencia. Necesitan, en particular, luchar contra la letra "C", de culpa. La mayor tensión aparece cuando consideran que el proyecto empresarial está superando las horas que deben dedicar a sus hijos.

La tendencia de las mujeres a optar por su negocio, en lugar de regresar a su antiguo empleo tras tener un embarazo, va en aumento. Un estudio del Institute for the Future, consultora especializada en tendencias laborales, señala que algunos mercados serán más activos en el desarrollo de empresas, como el de las mujeres en la etapa de carrera media (alrededor de 15 años de experiencia), inmigrantes y mamás emprendedoras.

En opinión de Sandra Herrera López, éstas son algunas características de las mompreneurs:

1. Primero sus emociones. Un punto de partida para las mamás es entender "que no tienen por qué ser perfectas para todo", es importante aceptar esa realidad. Ser buenas como mamás y empresarias ya es un gran paso, añadir la presión de ser excelentes deportistas, anfitrionas en el hogar, organizadoras de actividades, integrantes del comité de la escuela (y una larga lista de tareas) desborda la presión en su desempeño.

Ellas deben tener la tranquilidad de que para sus hijos es "la única mamá", y sabrán comprender la faceta emprendedora de la madre y el esfuerzo realizado. Fuera de eso "no hay que pasar la vida probando que eres buena ante los demás", dice Herrera.

En las incubadoras o centros de negocios de las universidades suele haber programas de coaching, o formación de vida, que forma parte de la asesoría para los emprendedores que inician su proyecto, y en donde se abordan este tipo de temas.

2. Pedir ayuda. Hay que perder el miedo a buscar apoyo de un tercero, y eso incluye ser constantes en el rubro de capacitación. Herrera asegura que las mujeres mexicanas muestran interés en reforzar o tener más conocimiento de las áreas contables, administración y legal. En algunos casos, añade, es difícil formalizar la actividad que empezaron como un "hobby" y ahora tiene la opción de traducirlo en un negocio formal. La asesoría es vital para ello.

3. Unirse a redes. Herrera reconoce que en México aún es escasa la existencia de clubes o redes formados por mamás empresarias para asesorarse y compartir información entre ellas. FONAES (Fondo Nacional de Apoyos para Empresas en Solidaridad) realiza algunas actividades de red dirigidas a mujeres que quieren formar su negocio, y otro ejemplo es la iniciativa Mujer Emprende, que cuentan con un club de networking. En opinión de la especialista de la UVM ésta es un área de oportunidad para que las mujeres organicen, por sí mismas, puntos de encuentro.

Existen sitios como Mompreneur donde se sugieren artículos, libros y hay una red en línea para este segmento de empresarias.

4. Afina el negocio. Sandra Herrera asegura que la maternidad representa para algunas mujeres un "nicho fértil de mercado". Si deseas gestionar desde casa un negocio, considera un análisis de mercado para detectar qué necesidades vinculadas a niños requiere atención. Hay que buscar en las cosas que ayuden a facilitar la vida en el hogar, sugiere la entrevistada.

Nuria Chinchilla, profesora de IESE Business School, señala que un atributo de las profesionistas mamás es la forma en que desarrollan vínculos con sus colaboradores. Ellas son mejor percibidas como jefas, según el estudio IFREI (International Family-Responsible Employer Index), realizado entre 300 encuetados, incluidos mexicanos. Un 31% reconoció sentirse apoyado si el jefe es hombre versus el 36% si es mujer. Ellas están más legitimadas para acciones importantes en cuestión de mejorar el ambiente de trabajo.

Autor: Ivonne Vargas Hernández