Las fiestas y reuniones empresarias, los Organizadores de eventos, y la “Generación Y”

Muchas de las decisiones que hoy toman las compañías, están en manos de jóvenes que han nacido después de 1980. Ellos son los que nacieron con Internet, con los celulares, los MP3 y las playstation. Son los protagonistas del porqué, los jóvenes del milenio, la “Next Generation” o “La Generación Y”.

Para los proveedores de productos o servicios empresarios es fundamental conocerlos, y saber qué ofrecerles. Para esto, resulta útil tener una breve descripción de nuestros nuevos clientes:

• Crecieron en un mundo “al instante”; por eso, valoran la velocidad.
• Son capaces de procesar distinta información, simultáneamente.
• Buscan el cambio.
• Son capaces de adaptarse rápidamente.
• Procesan las cosas nuevas con velocidad y las adoptan.
• Son capaces de desarrollar ideas con tecnología.
• Miran el futuro (no les importa demasiado el pasado).
• Son capaces de obtener resultados con menos esfuerzo, con menos recursos y en menor tiempo!!
• Saben que las cosas tienen que cambiar para sobrevivir.
• Tienen muchas ideas.
• Hacen foco en el buen uso del tiempo.
• Expresan rápidamente lo qué les molesta, aunque a veces carecen de “habilidad política”.
• Valoran compartir sus opiniones e ideas.
• Dicen lo que piensan y lo que sienten.

La “Generación Y” en los eventos empresarios.
En el ambiente empresario de hoy, es muy común encontrarse con un grupo organizador de eventos -como la fiesta de fin de año- formado por varios ejemplares de la “Generación Y”. Ellos han desarrollado más el lado derecho de su cerebro, que se concentra en lo creativo, y no tanto el lado izquierdo - racional y lógico - que marcó la forma de pensar de generaciones anteriores. Por lo tanto, quedaron lejos los tiempos en los que en una fiesta de fin de año había cenas formales de traje y corbata. Y más lejos aún, los momentos en donde todos esperaban las palabras del director general.
Hoy se valoran mucho más otras herramientas de diversión. Por ejemplo:

• espacios en donde jugar a una Play Station junto a los compañeros de trabajo,
• cambiar tu look con estilistas durante la fiesta,
• hacer un curso de make up,
• participar de una banda de música en vivo.

Respecto a lo gastronómico, predomina la mesa servida de una manera informal, y en ella se destacan los puestos de comidas étnicas. Se privilegia la “forma fácil” de comer, servidos en pequeños bocados para lo cual no es necesario utilizar cubiertos (lo que se dio en llamar finger food).
Los lugares distendidos con grandes camastros, puff y mullidos sillones, ahora se denominan “espacios chill out”,  “Pasá tu propia música”: muchos participantes eligen y tocan su propia música, en una nueva versión de los tradicionales DJ (léase disc jockey).

La tecnología aplicada a la diversión hoy es moneda corriente: los sms, el bluetooth, el Nintendo Wii, la web y los blogs se utilizan como herramientas para articular actividades recreativas y de diversión. Por ejemplo, los sms se utilizan para acreditarse, participar de sorteos interactivos o elegir la música; los invitados pueden sacarse una foto con el celular, y re-enviarla a sus compañeros; el Nintendo Wii permite armar sectores en la fiesta, donde los asistentes se agrupan para jugar con sus compañeros de trabajo …

Algo que además contribuye a dar nuevos aires a las fiestas corporativas son los tragos, realizados por barmans profesionales o incluso por los propios invitados.
¿Cómo hay que hacer para no morir en el intento de tener un cliente de la Generación Y? Aquí van algunos tips:

• Debe primero hablarles en el lenguaje que ellos entienden.
• Trate de tener entre sus colaboradores a jóvenes de la misma generación (ellos les dirán lo que le gusta a sus pares)
• Proponga predios alternativos a los tradicionales, para realizar la fiesta.
• Proponga actividades lúdicas tecnológicas.
• Tenga en cuenta que una fiesta es una fiesta, y no un evento institucional.
• Considere que ellos valoran otras cosas, diferentes a las de nuestros clientes tradicionales.
• Escuche para leer el contexto de lo que le piden.

Los organizadores de eventos hemos aprendido, a través de muchos años de profesión, a adaptarnos a diferentes tipos de terreno. El desafío hoy es entender a la Generación Y, porque son ellos quienes decidirán cómo va a ser la fiesta corporativa, y si nosotros seguiremos siendo sus proveedores.