Mentoring, aprendizaje en tiempo real

Mentoring, aprendizaje en tiempo real

En la actualidad se entiende que un sistema que funciona en tiempo real es aquel que interactúa activamente con su entorno, comprendiendo las posibilidades y las restricciones de cara al resultado esperado.

 

Con la expresión “aprendizaje en tiempo real”, no hago referencia al uso de recursos digitales, sino a la exigencia actual y cada día más deseada en las organizaciones de “aprender sobre la marcha”.

 

No obstante lo anterior, no podemos convertirnos en seres frívolos e inmediatistas, lo que sí es deseable, es aprender de las vivencias, asimilar cada experiencia y cultivarse con cada estrategia o táctica implementada.

 

Con el Mentoring estamos proponiendo una alternativa y reforzando un mensaje “La capacitación debe evolucionar”, no se puede seguir impartiendo catedra al estilo antiguo. Ahora, “El aprendizaje es parte integral de la práctica y la práctica es parte integral del aprendizaje”.

 

¿Qué aporta el Mentoring?

  • Captura lo valioso de cada experiencia.
  • Moviliza el aprendizaje de manera rítmica.
  • Apoya a las personas a implementar lo aprendido y a aprender lo practicado.

 

¿Qué promueve el Mentoring?

  • Diseminar el aprendizaje en toda área o nivel.
  • Observar el progreso, el desempeño y los resultados.
  • Asumir la responsabilidad de enseñar y aprender continuamente.

 

¿Qué promete el Mentoring?

  • Formar a las personas sin apartarlas de su sendero o su quehacer diario.
  • Crear el ambiente laboral enriquecido con educación práctica.
  • Recortar extensas jornadas de capacitación tradicional.

 

¡Coaching, Entrenamiento, Consultoría,… y ahora Mentoring!

 

¿Cuál es mejor?

Este es uno de los comentarios que escucho frecuentemente y mi respuesta es, depende de lo que se necesite y explico que son temas muy diferentes. Un Coach no necesariamente es un Capacitador, Entrenador o Mentor.  Y luego defino que es cada uno de ellos.

 

Coach:

Es quien únicamente elabora preguntas para inquietar e inspirar el propósito de personas y comunidades. No aconseja, no sugiere, no opina,… (Cuando lo hace infringe el código de ética del Coach).

 

Mentor:

Persona que usando una metodología específica, transfiere sus experiencias y aprendizajes a otras personas. (No enseña teorías, ni acude a modelos teóricos, filosóficos, matemáticos,… Únicamente instruye desde su experiencia, desde lo que aprendió por acierto o por error y luego lo sumó a su sapiencia de vida).

 

Consultor:

Es quien posee modelos específicos para reconocer variables, ofrecer opciones y brindar ilustración especializada, mediante conceptos traídos de estudios, academia, libros, capacitaciones, trabajos desarrollados por investigadores, etc…

 

Entrenador:

Persona con criterio y experiencia para proveer a otras personas, los conocimientos, las aptitudes, las habilidades, las competencias y los comportamientos indispensables para que mejoren las condiciones en las que asumen sus responsabilidades y resuelven sus problemas.

 

La adecuada integración y el justo balance de al menos estas cuatro disciplinas asegura la ejecución satisfactoria del trabajo en lo estratégico, lo táctico, lo operativo y lo relacional.

 

Algunos problemas surgen cuando un Coach, Docente, Entrenador,… acepta el reto de acompañar a las personas de una empresa sin tener las bases para hacerlo, por ejemplo:

 

  • Un docente sin experiencia en el mundo empresarial realiza una capacitación en una empresa.
  • Un Coach sin contacto en el ámbito organizacional realiza un proceso de Coaching empresarial.
  • Una persona pretende ser Mentor sin tener experiencia específica que transferir.

 

Y podría continuar con múltiples ejemplos, sin embargo, prefiero afirmar que en “La actualidad se requieren especialistas para cada contexto, esa una realidad indiscutible”.

 

Quienes aún no lo entienden están pretendiendo solucionar alguna situación con la metodología incorrecta, o contratando a las personas equivocadas, o aceptando trabajos en los que no logran los resultados solicitados.

 

Insisto, no es que alguna de ellas sea mejor que otra, es que tienen propósitos diferentes y los resultados dependerán de la seriedad y profundidad con que el Coach, o el Mentor, o el Entrenador, o el Consultor aborden cada proceso.

 

Si deseas enriquecer en tu organización la atmósfera en que se posibilite aprendizaje aplicable y real, con gusto podemos dialogar y estaré complacido de servirte.