Aptitudes del Director de Recursos Humanos
Según José Manuel Gómez Fernández, en su libro “Recursos humanos: fundamentos del comportamiento humano en la empresa”, entre muchas otras, una de las cualidades de un buen Director de Recursos humanos está relacionada con su capacidad de iniciativa propia.
Bajo este término, uno puede entender “la actitud humana para idear y aprender actividades, y para dirigir acciones” o “la disposición personal para protagonizar, promover y desarrollar ideas en primer termino” . Esto quiere decir no sólo que dicha persona debe ser creativa e ingeniosa para enfrentar con resolución acciones difíciles, sino también, y por sobre todas las cosas, innovadora.
En relación a la función del Director de Recursos Humanos, significa individualizar a las personas y transmitir a cada una de ellas el objetivo global que pretende alcanzar en la empresa. Cada sujeto es único e irremplazable y uno de los méritos del profesional debe estar relacionado con la captación de la singularidad de cada una de ellas para ofrecer distintas alternativas y llevar al bien común de la organización en su conjunto. Sin embargo, esta aparente capacidad de comprender y realizar las tareas operativas con eficiencia debe evitar bloquear la propia capacidad de iniciativa de los trabajadores. No sólo eso, la tarea de este profesional es estimular e incentivar las acciones positivas, que colaboren en beneficio del objetivo general.
Una de las principales dificultades se observa al momento de promover y dirigir soluciones en tiempos de crisis como los que se avecinan. Por ejemplo, si ante una situación complicada los demás no consiguen ofrecer alternativas viables de resolución, el deber del Director de Recursos Humanos no resolver el caso inmediatamente, ya que de este modo los trabajadores preferirán a futuro esta solución. En otras palabras, adoptarán una postura pasiva ante el problema, y de esta forma no conseguirá estimular las acciones individuales, que en muchos casos pueden darnos mejores soluciones.
Uno debe aprender a considerar al entorno de personas que me acompaña. Según Héctor Pauchard Hafemann, en su trabajo “Desarrollo Organizacional: sus Ventajas y Procedimientos”, “el recurso humano es decisivo para el éxito o fracaso de cualquier organización importancia (…) La importancia que se le da al Desarrollo Organizacional deriva de que el recurso humano es decisivo para el éxito o fracaso de cualquier organización. En consecuencia su manejo es clave para el éxito empresarial y organizacional en general, comenzando por adecuar la estructura de la organización (organigrama), siguiendo por una eficiente conducción de los grupos de trabajo (equipos y liderazgo) y desarrollando relaciones humanas que permitan prevenir los conflictos y resolverlos rápida y oportunamente cuando se tenga indicios de su eclosión”.
Para completar el panorama, el Director de Recursos Humanos debe ser alguien abierto y receptivo a las propuestas ajenas, y apostar por el desarrollo del personal. Esto implica tener la capacidad para comunicar adecuadamente sus ideas, para un cabal entendimiento de los sujetos, es decir, encontrar las mejores soluciones posibles y poder transferir estas a numerosos contextos y/o problemas; así como también motivar a sus trabajadores a través de la ilusión y el aliento, no sólo a través de los mensajes verbales, sino, principalmente en base a sus actitudes propias, su comportamiento ante las más diversas situaciones y su trato cálido hacia los demás. Para alcanzar esta meta, se hace imprescindible una pedagogía útil para planificar, ejecutar y evaluar procesos de enseñanza y aprendizaje, organizar mejor sistemas y programas educativos, con el objeto de favorecer al máximo el desarrollo del conjunto.