El 40% de los directivos planea contratar antiguos empleados

El 40% de los directivos planea contratar antiguos empleados

Con los avances de la economía, los directivos recuperan a quienes habían despedido durante la crisis

Pasado lo más duro de la crisis económica los directivos evalúan los planes del futuro inmediato de sus organizaciones y entre ellos está, en casi la mitad de los casos (40%), la recontratación de algunos de los empleados que habían sido despedidos como parte del recorte de gastos durante la recesión. De acuerdo con este nuevo estudio de la firma consultora OI Partners, las compañías de servicios financieros y las manufactureras son las más inclinadas a volver a contratar antiguos empleados, probablemente, debido a que fueron las más golpeadas durante la crisis y, por consiguiente, las que más tuvieron que despedir personal.

La lenta recuperación que vive el mundo actualmente tras pasar lo más duro de la crisis económica está mostrando distintas tendencias en los planes que tienen las organizaciones para su futuro inmediato con el fin de dejar atrás el mal momento, tomar correctivos para los errores cometidos y encaminarse de nuevo hacia el éxito de sus negocios.

Una de estas tendencias, después de los conocidos recortes de personal a los que tuvieron que recurrir miles de empresas en el mundo, es la de volver a contratar a aquellos empleados que habían tenido que despedir como parte del control de gastos implementado durante lo más fuerte de la crisis.

La firma consultora OI Partners acaba de dar a conocer un nuevo estudio en el que participaron 318 organizaciones de Norteamérica, según el cual, ahora que la economía toma otro curso, 40% de los directivos planea recontratar antiguos empleados ya sea tiempo completo, como consultores o como freelancers; 37% no planea tomar esta acción; y 23% no está seguro sobre sus planes.

Volver a lo conocido
Mientras antes no era común que una empresa tomara la decisión de volver a un empleado que hubiera despedido, las cifras de este estudio demuestran que la tendencia está cambiando: 36% de los empleadores ha recontratado a antiguos empleados ocasionalmente, 16% lo ha hecho frecuentemente, 29% muy rara vez y 19% no lo hace nunca.

Como lo explica el presidente de OI Partners, Tim Schoonover, “Esta actitud representa un cambio significativo en la filosofía de recontratar de los empleadores. En el pasado las compañías no hubieran recontratado empleados despedidos, pero ahora están más dispuestas y más empleados consideran regresar”.

Algunas cifras demuestran que mientras más se tuvo que despedir durante la crisis, más se está recontratando en la actualidad. Por ejemplo, las compañías de servicios financieros y las manufactureras son algunas de las que más sufrieron durante la recesión y en este momento son las pioneras de esta tendencia: 49% de las primeras y 47% de las segundas tienen planes de recontratar empleados que despidieron.

A estos dos sectores los siguen el de servicios con 42% y, debilitándose la tendencia, están el de asistencia sanitaria con 24% y el de gobierno y organizaciones sin ánimo de lucro con 21%.

Las ventajas de restablecer antiguas relaciones laborales
Ahora que las empresas empiezan a recuperarse y a hacer planes para retomar su rumbo, las cifras dan a entender que muchas de ellas han evaluado las ventajas de volver a integrar a sus equipos a aquellos empleados que tuvieron que dejar ir como parte de las estrategias de control de costos.

Los principales motivos que encontró el estudio para la recontratación de antiguos empleados fueron que los directivos ya conocen sus habilidades; ya saben que sí encajan dentro de la cultura organizacional; que hay una falta de expertos en áreas especializadas como tecnologías de información y comunicación, mercadeo y finanzas; y que es menos riesgoso que contratar nuevos empleados.

Como afirma Schoonover, “Recontratar empleados despedidos es una forma de mantener bajos los costos de contratación ya que no habrá honorarios que pagar. Los empleadores ya conocen los talentos y habilidades de los trabajadores, ellos pueden volver a desempeñar sus antiguos trabajos rápidamente y ya han demostrado que encajan bien en la organización”.

Razones prácticas, de facilidad, rapidez y de costos son las que mueven a los directivos a conservar una buena relación con quienes despiden en momentos difíciles para abrir las puertas a una reincorporación apenas mejoren las condiciones del negocio y se pueda volver a contratar.

Y es que, citando nuevamente a Schoonover, “El costo de una mala contratación puede llegar tan alto como hasta tres veces el salario de un empleado, incluyendo indemnización, compensación por desempleo, gastos de reclutamiento, ingresos del negocio y productividad perdidos, y potenciales demandas por malas terminaciones del contrato”.

Como dice el refrán, a veces es mejor malo conocido que bueno por conocer.

Autora: Catalina Franco R.