EL CREADOR CONSCIENTE Y LAS RESISTENCIAS
Las resistencias son las barreras que uno mismo se pone para no fluir, para no permitirse avanzar. Pero nosotros, nuestra parte consciente quiere avanzar más rápido, quiere llegar a lograr más. Y sobre todo después de escuchar sobre la ley de atracción, uno empieza a soñar más en grande, empieza a saber que las cosas se pueden convertir en realidad. Y tus sueños, cuando escuchas y empiezas a comprender la ley de atracción pasan de ser lo que antes creías que podías lograr, a un mundo de sueños más grandes. Ahora, empiezas aumentar el tamaño y la cantidad de sueños que tienes.
Es como empezar a apretar más duro el acelerador, querer avanzar muy rápido por la vida, querer lograr más. Pero tu otro pie, está apretado muy fuerte en el freno, esa es la resistencia que nosotros causamos, y vez si aprietas el acelerador fuerte y el freno está apretado, lo que estás causando es que trabaje más duro el motor. Puede ser que avances un poco, pero con más trabajo, porque hay una parte de ti tirando hacia tus sueños y otra parte de ti está tirando hacia atrás, y es cuando se produce la lucha, estar ''no fluyendo'' por la vida, estar luchar demasiado duro por conseguir los sueños.
Eso también es resultado de una creencia de que para llegar a ciertas metas hay que luchar muy fuerte, o que el universo o la vida es una lucha constante, de que para lograr esos sueños uno tiene que trabajar muy duro.
El experimentar lucha en la vida, el experimentar estar luchando constantemente, el experimentar que la vida sea difícil es una manifestación de la creencia de que hay trabajar muy duro, de que la vida no es simple, de que no podemos fluir fácilmente por la vida.
El pasto no trabaja muy duro para crecer, una semilla no le cuesta trabajo convertirse en una flor, simplemente son, y naturalmente van creciendo y se convierten en una flor. Es un proceso natural, así somos nosotros, si nosotros nos permitimos fluir, si nosotros nos permitimos ser quien realmente somos y permitimos que nuestra vida se vaya desenvolviendo, se vaya revelando frente a nosotros y nosotros nos rendimos frente la vida.
No es que dejes de luchar por tus sueños, no es rendirte en ese aspecto, es simplemente permitirte fluir, permitirte dejarte llevar por tu misma vida, por cómo tú vida se va desenvolviendo frente a ti. Porque a través de esas experiencias de contraste, de esas experiencias que parecía que tú no querías crear, es cuando tú vas a aprender por qué es que lo estás creando, y más a acerca de ti: ¿Qué es lo que hay dentro de ti que está creando esa situación?
En vez de bloquearte y decir “¿por qué estoy atrayendo esto?, ¿por qué creé esto? Yo no soy el que lo está creando”, eso es dejar de fluir.
Si simplemente te permites fluir por esta experiencia que parecía no placentera, que parecía que no era una experiencia que tú habías programado o que tú habías elegido crear, y te permites fluir por ahí, aprender cuál es el mensaje, qué tiene esa experiencia para ti, que puedas aprender más acerca de ti, de tus resistencias y qué tanto te estás permitiendo fluir por la vida. Es entonces, cuando vas a salir de esa experiencia dolorosa o de esa experiencia de contraste. Cuando aprendes, o cuando te das cuenta, cuando aprendes la lección o cuando te das cuenta de qué lo creó.
La manera de salir de esas situaciones de esas experiencias dolorosas o de contraste, es aceptando que uno las creó. El no creer que tú eres el creador es ceder tu poder de creación, es negar tu poder de creación, es creer en algo externo a ti, a tu poder de elegir, tu poder de que tu eres el creador de tu vida.
Si tú cedes ese poder, ¿cómo vas a poder resolver esa situación? No puedes decir ''yo soy el creador de mi vida, pero yo no he creado esto y esto'', tienes que dejarte llevar, rendirte ante esta verdad, de que tu eres el único creador de tu realidad.
Porque solamente aceptando que tú eres el creador de una situación, es cuando vas a poder cambiarla, cuando vas a poder liberarla, cuando vas a poder cambiar esa realidad. Y mucho estamos, luchando, batallando, tratando de cambiar la realidad para que sea lo que nosotros queremos que sea conscientemente, sin haber aceptado que nosotros a un nivel subconsciente, consciente y súper-consciente, hemos creado cada paso de nuestra vida, cada paso de nuestra realidad.
Nosotros experimentamos y vamos creando constantemente para que nosotros vayamos creciendo, vayamos evolucionando, nos vayamos dando cuenta de quienes realmente somos. Vamos creando experiencias que nosotros vamos eligiendo, te repito no siempre conscientemente, ahí es donde entra la resistencia de las personas que creen que lo que estamos diciendo no puede ser verdad, porque ellos no eligieron crear esa situación de abuso, de violencia, de contraste, de pobreza, de pérdida, de fracaso, de pérdida de dinero.
Esa resistencia a creer que nosotros fuimos los creadores de esa experiencia, no nos permite aprender cuál es la lección, cuál es el mensaje, y obtener el beneficio, obtener la lección de esa experiencia y salir del otro lado para comenzar a elegir algo diferente.
Mientras sigas sintiéndote víctima de las situaciones estás cediendo tu poder. No hay víctimas, a un nivel espiritual, a un nivel alma, a un nivel profundo no existen las víctimas ni los villanos. A un nivel profundo, nosotros elegimos experimentar físicamente, a eso venimos como almas, como espíritu, venimos a experimentar en un cuerpo la creación de lo que nosotros vamos creyendo, de lo que nosotros vamos eligiendo.
Sentirse víctima, es una manifestación de ceder tu poder, de que no estás empoderado dentro de tu poder de creador. Cada vez que no estés dentro de tu papel de creador, dentro de la esencia de quién realmente tú eres, mientras más te vayas alejando, mientras tus creencias, tus perspectivas, tú percepción de la vida se va alejando de quien realmente tú eres, de quien realmente tú eres en esencia, de quién realmente tú eres en alma. Te vas a empezar a sentir más desapoderado, te vas a empezar a sentir más en dolor, vas a empezar a luchar más por la vida.
Para empezar a dejar de luchar tienes que ponerte en los zapatos de un ser poderoso, porque es lo que eres, en esencia todos somos iguales. Fuera de este mundo o de este universo de tres dimensiones, no existen los juicios de quién es mejor o quién es peor, de que si alguien es alto es mejor que alguien que es bajo, no existen los juicios de que, si eres hombre o eres mujer, no existen los juicios de cuál es tu preferencia sexual.
Nosotros en este nivel, tenemos juicios acerca de nosotros mismos y los reflejamos hacia los demás, como una manera de vivir en un universo en el que hay jerarquías, en el que hay mejores y en el que hay peores. Y nos vamos desenvolviendo en esa realidad. Recuerda lo que creemos o lo que percibimos, es lo que vamos a experimentar.