Cómo volverte serio con tu trabajo y empezar a obtener resultados
Aquí tienes 6 atajos que te ayudarán a mejorar la calidad, alcance e impacto de tu trabajo, te acercarán a un umbral más profesional y posiblemente producirán un resultado más que aceptable.
1. Planificación inmediata: idealmente, planifica tus tareas, proyectos y reuniones con poco tiempo de espacio. Es decir, de un día para otro, cuando todo cambia constantemente a una velocidad vertiginosa. Planificar tu agenda de trabajo a un mes vista puede ser no tan efectivo como solía ser antes. Esta es mi agenda, cambia diariamente y me permite ser altamente flexible al mismo tiempo que productivo.
Nota: esto no incluye viajes y eventos extraordinarios, esto se reduce únicamente a eventos diarios.
2. Tómatelo de manera personal: porque lo es, las personas quieren conectar contigo, reunirse contigo, trabajar contigo, colaborar contigo, esto implica dedicar tiempo a otras personas. Si dedicas demasiado tiempo a otras personas, te quedarás sin tiempo para ti y acabarás frustrado, el juego habrá acabado. Fija una serie de personas con las que deseas, quieres y necesitas conectar, dedicar tiempo, cuidad y mimar para que tanto su trabajo como el tuyo (personal y profesional) se culmine. Las que queden fuera de esa lista, hay dos opciones: primera, ser contundente y claro con tus intenciones al decirles que no entran en tus planes, o segunda, silbar y mirar hacia otro lado. La primera opción y tomarlo de manera personal, es algo que Nando hace de manera excepcional.
3. Toca emocionalmente: las personas quieren sentir lo que sientes al trabajar, quieren ser emocionadas con el resultado de tu trabajo, con lo que escribes, con lo que cuentas en tu charla, el mensaje que tu marca de ropa transmite o con la comida que sirves. Convierte tu trabajo en una plataforma para transmitir un mensaje humano, íntimo y genuino. Religion es un claro ejemplo.
4. Evita la repetición de tareas que no te apasionen: cuidado con el tipo de tareas que realizas. Escribir posts todos los días, 7 veces por semana, durante 365 días al año durante tres años seguidos podría ser algo repetitivo y cansino. En cierto punto, muchos abandonan, la clave para continuar es la pasión por lo que haces. No creo que Guy Kawasaki envíe un centenar de tweets al día que poco tienen que ver con su profesión real sólo por negocio.
5. Aprende de tu vida: buscas conocimiento en masters, universidades, cursos sofisticados y en eventos con “roockstars”, cuando en realidad el mejor conocimiento y experiencia lo tienes ahí, frente a tu nariz. Tus defectos, errores más comprometidos, auditorías para clientes de industrias que nunca antes habíais explorado, planes de trabajo complejos, conversaciones intensas con personas que te inspiran o soluciones a problemas que parecían insalvables. Cuanto más personal es lo que haces, mayor es el aprendizaje.
6. Conecta dimensiones: es posible que seas realmente bueno trabajando, tus jefes estén contentos con tu rendimiento – o si eres autónomo llegues a ganar lo suficiente como para que los impuestos de esta sociedad destartalada no te coman – entregues los informes de resultados satisfactorios y a tiempo, completes todas las tareas antes de acabar al día y hasta seas reconocido por ser un gran trabajador. Esto es maravilloso. ¿Y luego? ¿Qué sucede después del trabajo? ¿Estás lo suficiente absorbido por tu trabajo que cuando lo desempeñas no hay diversión, humor, perspicacia y alineamiento con tu vida fuera de él? Cuando llevas las experiencias vitales al trabajo y viceversa, entonces produces un resultado más chocante. Esto te lleva a otro capítulo del libro.
Serio no significa formal, formal no significa correcto, correcto no significa adecuado, adecuado no significa completo y completo no significa excepcional.